En pleno centro cívico de la comuna de Colina y a pasos de la ex Iglesia Inmaculada Concepción construida en 1579, el templo más antiguo del país, la Brigada de Operaciones Especiales realizó una de las ceremonias más simbólicas del Ejército, el Juramento a la Bandera. Acto cívico-militar presidido por la autoridad de la Provincia de Chacabuco Adela Bahamondes Fuentealba y que tuvo como gesto abrirse a la comunidad.

Adela Bahamondes Fuentealba, quién pasó revista por las tropas señaló que “este es el último juramento de la bandera que presido como Gobernadora de la Provincia, pero con una connotación distinta, con una ceremonia en la calle, dando muestra de la apertura que ha tenido el Ejército de Chile.

“Este acto es tal vez una de las ceremonias más importante dentro del Ejército junto con la entrega de armas y la conmemoración de los 200 años de la instalación del emblema nacional (instituido en 1817 por el Padre de la Patria), por lo tanto tiene adquiere una relevancia mayor” aseveró la autoridad.

El General de Brigada Pablo Müller Barbería, Comandante de la Brigada de Operaciones Especiales del Ejército indicó que “Es un honor estar presente en la capital de la provincia. La BOE nació en Colina y nos sentimos parte de la comunidad. Hacer este acto -donde los jóvenes se comprometen ante dios y la bandera- es fundamental realizarlo frente a la ciudadanía, comprometiéndonos con nuestro país en valores como el honor y el patriotismo.”

Mario Olavarria, Alcalde de la Municipalidad de Colina indicó que “yo me alegro mucho de esta iniciativa impulsada por el General de la BOE Pablo Müller en el sentido de volver con esta ceremonia del Juramento a la Bandera, la más importante del Ejército de Chile  y que hoy se desarrolla en la vía pública y con los familiares de los soldados. Se le ha dado un sentido muy distinto a esta ceremonia y espero que se trasforme en una tradición como parte de las actividades de la comuna.

El juramento a la bandera, se desarrolla cada año como un homenaje a los 77 soldados que perecieron en la heroica Batalla de la Concepción en 1882 y hasta ahora se mantiene vigente este acto solemne donde los soldados se comprometen a dar la vida si fuese necesario por la patria.